viernes, 25 de septiembre de 2020

CHUPALO

Amo Grey colocó el vibrador en el suelo, fijandolo con la ventosa que tenia y me ordenó: 
- Ahora chúpalo, cómetelo como si fuera mi polla. 
Sabía que aquel juego me haría sentir humillada. Se lo había contado hacía un par de días antes, cuando estábamos viendo una peli porno.  Y supongo que en cuanto se lo dije, pensó que sería un juego divertido. 
Dudé un segundo, pero finalmente lo hice, acerqué mi boca al vibrador y primero lamí el glande suavemente. 
- Vamos puta, métetelo todo dentro de la boca, quiero ver como lo chupas, como lo lames y como disfrutas haciéndolo. 
Todo mi cuerpo se estremeció al oír sus palabras. Y obedecí a pesar del sentimiento de humillación que me embargaba. Lamí la polla de latex y mientras lo hacía sentí como Amo Grey sacudía su flogger sobre mis nalgas desnudas, una, dos, tres veces, haciendo que me excitara. Al cabo de un rato me dijo: 
- Muy bien, lo has hecho muy bien. Ahora puedes desnudarme y comérmela a mí. 
Todo mi cuerpo se estremeció y de nuevo, acercándome a él obedecí. Amo Grey estaba de pie, bajé la cremallera de su pantalón de cuero, saqué su polla y empezó a lamerlo suavemente. Disfruté de aquel momento, de la sensación de su polla en mi boca, de su sabor. Al igual que él. 


 

viernes, 18 de septiembre de 2020

BAJO EL VESTIDO


Me gusta Amo Grey porque siempre me sorprende con algo nuevo, y eso hace que nuestra relación sea sorprendente y que nunca sepa que debo esperar. Y eso lo digo porque no hace muchos dias, se le ocurrió algo que no habíamos hecho antes. 
Nos levantamos por la mañana, me duché y antes de que me vistiera Amo Grey me dijo: 
- Ven aquí preciosa, tengo un nuevo juego para tí hoy. 
Me acerqué hasta él, tenía una cuerda de algodon entre las manos, que parecía bastante larga. 
- Vas a llevar esto debajo del vestido, hoy. Nada más solo esto - me dijo, empezando a enredar las cuerdas alrededor de mi cuerpo. 
Las enredó, por mi torax, por debajo de mis pechos, luego por encima, enmarcandolos, luego descendió hasta mi sexo, haciendome abrir las piernas, enredó la cuerda alrededor de mi sexo enmarcandolo, cuando terminó, me ordenó: 
- Camina hacía la puerta y vuelve. 

Obedecí caminando hacía la puerta y sintiendo como la cuerda rozaba mi sexo produciendome cierto placer. 
- Muy bien ¿cómo se siente? - me preguntó. 
- Un poco molesto pero agradable a la vez también,
- ¿Te excita? 
- Sí, un poco, 
- Bien, vistete. Cuando volvamos por la noche te lo quitaré, 
- Sí Señor. 
Así pues, pasé el día con la cuerda anudada a mi cuerpo, debajo del vestido. Fue un día diferente y peculiar. A ratos me sentía bien, era agradable y me causaba cierto placer, pero a ratos era un tanto insoportable, incluso doloroso sentir las cuerdas rozando mi sexo. Eso sí, me hacían recordar continuamente que aquello era un juego de mi Amo, y que lo hacía porque era suya, porque le gustaba verme sufrir y gozar a partes iguales. 
Cuando volvimos a casa y llegó el momento de quitarme las cuerdas, yo estaba a mil, el roce de la cuerda en mi sexo, el pellizco que me había producido en él, hacia que estuviera sensible y excitada. Amo Grey me preguntó que sentía, que había sentido y se lo conté. Le dije que durante todo el día, me había sentido excitada e incomoda a partes iguales y que sentir el roce de las cuerdas, había hecho que no pudiera dejar de pensar en él y en que era suya. 
- ¿Y ahora como te sientes? 
- Excitada, sensible. 
Rozó mi sexo con sus dedos y me estremecí. 
- Bastante sensible, por lo que veo - señaló. 
- Sí, Señor. 
- ¿Quieres que te folle? - me preguntó. 
- Sí, Señor, me gustaría, si tú quieres. 
Y lo hicimos. Fue muy sensitivo y maravilloso. 

LA PROPUESTA

El post que subo hoy es de Archivo, de mi antiguo blog. De como conocimos a Sir Marlon y su sumisa Anabel, un gran amigo nuestro. 

Tras la sesión que mantuvimos en el local, mientras Amo Grey me desataba, una de los Amos que había estado observando, se acercó a nosotros. Se presentó diciendo:
- Hola, soy Sir Marlon y esta es mi sumisa Anabel.
Me incorporé, mientras Amo Grey los saludaba.
- Verás, he estado observando atentamente la sesión y he visto que sois novatos los dos en esto ¿verdad? - Amo Grey me miró como preguntándose como se habría dado cuenta.
- Sí, llevamos poco tiempo - le respondió - y estamos aprendiendo juntos.
- Bueno, es que quería proponeros algo, si os parece bien, yo podría enseñaros algunas cosas y técnicas. Realiza cursos de BDSM. Tengo una casa en las afueras y podríais asistir a algún taller. Este fin de semana realizaré uno sobre spanking, quizás os interese.
- Podría ser - respondió Amo Grey un poco dudoso, intuí por su mirada que necesitaba que habláramos sobre ello.
- Bien, mira está es la dirección, si os animáis sólo tenéis que llamarme - dijo ofreciéndole una tarjeta a Amo Grey.
- Gracias.
El Amo salió de la mazmorra y nos quedamos a solos Amo Grey y yo. Amo Grey cerró la puerta y me llevó hasta el rincón donde estaba la cama.
Primero estuvimos hablando de las sensaciones, de como nos habíamos sentido durante la sesión y luego me preguntó que me parecía la propuesta que nos había hecho Sir Marlon. Le dije que me parecía bien, que podíamos probar y así aprenderíamos cosas nuevas. Creo que nos ayudará mucho aprender algo de alguien que tiene más experiencia que nosotros y así también vamos haciendo amigos dentro de esta comunidad que cada vez me parece más interesante.

martes, 15 de septiembre de 2020

ATADA

Usando las cuerdas de la mazmorra, esta vez Amo Grey, me ató de otra manera a como lo hace habitualmente. Me hizo inclinar, me ató las manos a la espalda con las esposas y luego, me ato las piernas juntas, dejándome doblada y con el culo listo para él.
- Estas tan hermosa así - dijo acariciando mi culo al terminar de atarme. Luego siguió hablando de las bondades del Bondage y de atar bien a una sumisa para tenerla justo como y donde quieras. Yo le escuchaba, restando expectante y a la espera de sus caricias o sus juegos. Pero esta vez no hubo juego, no hubo azotes ni caricias.
Amo Grey se bajó la cremallera del pantalón, sacó su sexo, y me penetró, me folló durante unos minutos. Y cuando yo empezaba a sentir el placer creciendo se detuvo. Salió de mi y se alejó. Se sentó en el sofá cogió un periódico y se puso a leer, dejándome allí, atada, expuesta. No sé cuanto tiempo estuve allí, atada, inmóvil, con mi culo desnudo y apuntando hacía él. Sólo sé que se levantó varias veces del sillón, que me follaba durante unos minutos, cada vez, los justos para que me excitara pero no llegara nunca al orgasmo, y cuando el ya no podía más, se puso delante de mí, sujetó mi cabeza e introdujo su polla en mi boca y me la folló hasta que se corrió haciendo que me tragara todo su semen. Luego me desató, dejándome sin orgasmo, sin placer y sin liberación. Me dijo que era un castigo, porque no me había puesto el collar al empezar la sesión. Ni siquiera me había dado cuenta.

viernes, 4 de septiembre de 2020

SORPRESA EXCITANTE

Hola, ya hemos vuelto de las vacaciones así que aquí seguimos con nuestra aventuras, reemprendo el blog con un nuevo post de Archivo, sobre ser usada como mueble. 

El otro día, justo un par de días después del fin de semana que pasamos junto a Sir Marlon, Amo Grey me tenía preparada una sorpresa. Me invitó a cenar en su casa, últimamente, eso supone que además me quedaré a pasar la noche allí. 
Me dijo que tenía una sorpresa preparada. Cuando llegamos a su casa yo estaba supernerviosa. Me dijo que tras las cena vendría la sorpresa. Al terminar me ordenó que me desnudara y me pusiera en cuatro frente al sofá del salón. Obedecí y vi que ponía una bandeja bastante grande sobre mi espalda. Y entonces me di cuenta, iba a ser usada como mesita de café. Era una de mis fantasías, así que imaginaros mi alegría y excitación al ver que iba a cumplir esa fantasía. Puso unos vasos y una botella o eso me pareció por el peso. Luego dijo: 
- Espero que no tarden mucho mis invitados. 
Oír aquello me puso más nerviosa de lo que ya estaba. Amo Grey me dio las última indicaciones: 
- No debes moverte, ni siquiera un milimetro pase lo que pase, ya sea te toquen, te acaricien o te rocen, ya que se supone que eres una mesa. Si te mueves lo más mínimo, te castigaré luego. ¿Entendido?
- Si Señor - respondí. 
Tras eso sonó el timbre. Amo Grey fue a abrir la puerta y oí que saludaba: 
- Bienvenidos, pasad. 
- Gracias, vamos perra - era la inconfundible voz de Sir Marlon y supuse, iba con su sumisa. 
Entraron y Amo Grey les pidió que tomaran asiento y les preguntó si deseaban tomar algo. 
- Preciosa mesa - dijo Sir Marlon.
- Sí, es nueva - respondió Amo Grey.
Saber que me estaban mirando, mientras estaba en  aquella posición me excitó. Y entonces noté una mano acariciando mi culo. 
- Es de buen material - dijo Sir Marlon, que aventuró su mano hasta mi sexo y lo acarició suavemente. 
Yo estaba a mil, superexcitada, pero además me empezaban a doler los brazos por el esfuerzo de tener que soportar la bandeja que tenía apoyada en la espalda. También Amo Grey acercó su mano y acarició mis senos diciendo: 
- Si, realmente es de un buen material - tiró de mis pezones y a punto estuve de gemir, pero me contuve. Eso sí, no pude evitar moverme ligeramente lo que provocó un aviso por parte de Amo Grey diciendo - No puedes moverte, puta. 
Traté de mantenerme quieta. El resto de la velada, los dos Amos hablaron entre ellos, sobre sesiones, técnicas de excitación, tortura, etc, mientras yo trataba de mantener la postura sin moverme aunque cada vez se me hacía más difícil pues me dolían las manos al tenerlas apoyadas sobre el suelo. Me moví un par de veces más, siendo reprendida. Y cuando finalmente, Sir Marlon y su sumisa se marcharon, Amo Grey sacó la bandeja de mi espalda, me hizo levantar y llevándome hasta la puerta que separaba el salón del recibidor, me enseño las cadenas que había colgado con unas alcayatas y me dijo:
- Hoy te azotaré aquí, mientras tus brazos penden de las cadenas.