jueves, 27 de febrero de 2020

SPANKING

Spanking: es oír esta palabra y ya siento como mi sexo se moja, se contrae, se revoluciona. Y a veces, me sorprende que con sólo oír esa palabra me suceda eso, imaginad como me siento, cuando mi Amo me hace desnudar, me ordena que me ponga en posición con el culo hacía afuera y veo que coge el flogger o la paleta. Entonces mi sexo ya se convierte en un mar, y cuando los golpes caen, mi voz se hace grito de placer, jadeo, y mi cuerpo se convulsiona presa del placer tras los golpes. Es algo mágico, maravilloso para mí y que cada vez ansío y deseo con más vehemencia. Y creo que Amo Grey lo sabe. Hace ya días, que no me somete a una sesión de Spank,  y creo que lo estaba retrasando, para que cuando lo hiciera yo pueda disfrutarlo. Y así ha sido. Al llegar a casa hoy, nada más entrar me ha ordenado: 
- Prepárate, te quiero desnuda, doblada sobre la cama, con las manos apoyadas en esta y el culo hacía afuera. Y sacas el cepillo grande. 
Obedezco dirigiéndome a la habitación, empezando a excitarme ya, pensando en como será la sesión.
Amo Grey no tarda en llegar, se mueve a mi alrededor, toca mi culo suavemente, luego coge el cepillo y se sitúa a un lado, y sin previo aviso, deja caer el cepillo sobre mi culo. Los golpes caen uno tras otro, haciendo que me estremezca, que mi nalga se ponga roja, que duela, que escueza. Amo se detiene, y comprueba mi humedad. Luego sigue azotándome con el cepillo.  Cada vez estoy más excitada, mi cuerpo se convulsiona tras cada golpe. Y entonces Amo Grey, lanza el cepillo sobre la cama, se pone tras de mi, acaricia suavemente mi sexo, y luego sin más preámbulos, me penetra, me posee y me hace suya. Me folla, sin contemplaciones, hasta que se corre y luego sigue follándome, hasta que soy yo la que se corre. Y todo me parece tan salvaje, tan animal, pero me siento bien, me siento liberada cuando terminamos. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario